Cosas Varyadas

Una nueva década se aproxima para mí. Salgo de estar en la tan incomprendida década de los años 10. Son veinte años de vida y el miedo no desaparece. No ese miedo que no te deja mover, sino todo lo contrario. Un miedo que te hace cambiar, pensar, replantear lo que estás haciendo. Tener miedo al fracaso me ha llevado a que siempre de lo mejor de mi mismo para no producir errores. No dejo de tener miedo. Ese miedo que me hace pensar dos veces antes de decir o elaborar algo para no arruinarlo. Lo bueno es que siento que ese miedo no es sinónimo de soledad. Ya son 20 años. Veinte de los cuales me costó tener confianza. Puede ser que sea por el miedo, pero dar confianza es de lo que recién he aprendido a manejar. Confianza en mí, sí; bueno, de vez en cuando dudo de mis respuestas, pero no dudo de mi conocimiento; confianza en los demás, no mucho. Pensé que si todos sabían quien era, nadie lo sabría. Pues, me equivoqué. Lo mejor del anonimato, es que nadie espera lo mejor de uno, tan sólo

Quién no tuvo una mejor amiga o un mejor amigo en el colegio. Pues, yo siempre he dicho que en el colegio nunca he tenido alguno. Creo que eso es un método de defensa para no hacer algún vinculo fuerte con alguien. Sin embargo, sería hipócrita de mi parte no mencionar a una colega frustrada. Ella y yo siempre hemos coincidido en varios temas. No sé si se necesita un titulo para la amistad que hemos tenido, creo que basta con decir que la estimo un montón y que espero que ella alcance todos sus metas porque se lo merece. Ella es Alexandra. En esta oportunidad, no voy a poner ningún apodo de animal, porque no lo tiene. Creo que es el momento indicado para escribir sobre ella. Me siento orgulloso. Cómo no sentirse orgulloso de aquellas personas que quieres y que ves que, aunque sea de lejos, luchan hasta lo último para conseguir sus objetivos. Ella ha logrado obtener su merecido puesto como estudiante de Ingeniería de Sistemas en la Universidad Nacional del Callao. Saben que hice mi

Basarse en lo irracional y lo matonesco provoca una pelea primitiva sin argumentos validos y menos aún para poder dar o pedir disculpas por orgullos. Esto no se da por falta de sabiduría, porque conocimientos varios se puede tener, pero que por falta de cultura de dialogo da estos accionares que minimizan, según ellos, a las demás personas sin saber que estos bárbaros no han podido generar un respeto por sapiencia, sino por un material físico verde que logra una transacción al fiel estilo del dame que te doy. En el raciocinio de individuos que crecieron por sus propios talentos y que siempre se les aplaudió por ello, actitudes que desmerecen a los demás, les resta puntos en lo que ellos mismos han logrado. Creer que se ha obtenido un posicionamiento en la sociedad por ser tan sólo lo que uno es, parece no ayudar a que se pueda valorar lo que otros son. No es suficiente tan sólo ser, tampoco hay que ser lo que otros quieren ser. Lo que faltaría sólo es hacer. Hacer lo mejor para to

No te extraño No te busco Ya no te busco No necesito hacerlo Las cosas cambiaron Yo sigo aquí Aquí parado Ya no te extraño Ya no te busco Sólo espero Espero a que aparezcas Que solo aparezcas No es un amor Es un te quiero Pero no te extraño Tan solo te quiero Si no puedo estar Estar a tu lado Para qué estar Prefiero no estar No necesito buscar Sé dónde estás Pero para que estar donde tú estas Mejor sigo estando acá Aquí me quedaré Ya no saldré No me moveré Me quedaré a ver Espero ver Ver si regresas No me moveré Pero tan solo si no regresas